El día de hoy (07 de junio de 2018), la NASA ha hecho un anuncio de dos nuevos descubrimientos hechos por nuestro robot favorito en el planeta rojo, el Curiosity.
Al analizar muestras tomadas de rocas de tres mil millones de años de antigüedad, el Curiosity descubrió la existencia de moléculas orgánicas. Como todos sabemos, la vida en la Tierra está basada en este tipo de moléculas. Pero, esto NO quiere decir que Marte tiene o tuvo vida, solo quiere decir que los ingredientes base para formar la vida alguna vez existieron ahí. Una cosa que tenemos que tener en cuenta, es que las moléculas orgánicas también pueden ser creadas por procesos naturales que no se relacionan con la vida. Por lo cual, más análisis son necesarios para poder sacar conclusiones. Así que si bien este descubrimiento NO demuestra la existencia de vida en ese planeta, nos enseña que las moléculas orgánicas existen en la superficie de otro planeta con superficie rocosa.
El otro descubrimiento es un ciclo de metano en la atmósfera de Marte. Recordemos que Marte también tiene atmósfera, aunque más tenue y de diferente composición que la de la Tierra. Al analizar los datos de la atmósfera de tres años marcianos (o bien, casi seis años terrestres), los científicos de la NASA encotraron un cambio de metano que depende en las estaciones del planeta habitado por robots. Las cantidades de metano aumentan en el verano y descienden en el invierno. Si bien hay procesos químicos entre agua y rocas que pueden generar este ciclo, los científicos aún no descartan que este ciclo se deba a un origen orgánico.
Citando al twitter del Curiosity:
«Oh, estos son organicos en mi vencindario… el metano aumenta cada verano y hay compuestos antigüos de carbono en rocas. Aún no he encontrado vida en Marte, pero la envidencia nos dice que vamos por el camino correcto»
Este tipo de descubrimientos nos recuerdan que ese punto rojo que se pasea por el cielo, aunque diferente al nuestro, es otro mundo.
Astronomía Divertida 
